La Verdad Sobre los Medicamentos Caducados Estimado amigo, apreciable amiga: ¿Cuántas veces ha intentado hacer uso de algún medicamento que tiene en casa, sólo para comprobar que éste ya ha caducado? ¿Cuántas veces ha tenido que tirar a la basura dichos medicamentos? Ahora bien…. ¿Sabe cuánto dinero pierden las farmacias mexicanas por medicamentos caducados? ¿Qué pasa realmente cuando se hace uso de un medicamento fuera de su fecha vigente de caducidad? ¿Nos hace daño? ¿Nos envenena? ¿Nos mata? O simplemente … ¿No nos hace provecho? Antes de intentar reflexionar sobre los tópicos anteriores, en los que estoy completamente seguro que TODOS y TODAS las personas nos hemos visto implicados, comentaré a mis dos amables lectores que un servidor es Farmacéutico, que nací en la farmacia, (Desde luego gracias a mi señora madre), que antes de tener uso de razón, mi madre me dormía en uno de los estantes de madera de los anaqueles de su farmacia, que antes de ir a la escuela ya sabía leer de corrido (gracias a la afición que por las historietas tenía mi hermano mayor) y que devoraba prácticamente desde los 4 años, todo libro, toda caja de medicamentos, literaturas médicas etc. (desde luego sin comprenderlas, sólo familiarizándome con los términos ahí vertidos) y que a la ‘tierna’ edad de 5 años, sorprendía a los agentes y personas que nos visitaban ‘declamándoles’ la fórmula del medicamento ‘Magnopyrol’ que textualmente decía: Cada comprimido contiene: Fenildimetilpirazolonametilaminometanosulfonato de magnesio….. 500 mg. (Más tarde se le llamaría ‘dipirona magnésica’ y ahora solamente ‘metamizol’) Bueno, comento lo anterior no como presunción, (Que caso tiene aprenderse esa dichosa formulita, que aun ahora la he recordado), sino como antecedente de que un servidor ha estado ligado por más de medio siglo a la industria expendedora de los medicamentos de patente. (Poco me tocó de la época de los medicamentos magistrales) También mencionaré que soy capacitador autorizado por la S.S. (no vigente) del Curso de Manejo y Dispensación de Medicamentos en Farmacias. Bueno, ahora sí, con la autoridad que espero haberle generado y además por la experiencia mencionada vamos a desgranar la mazorca de las caducidades, no sin antes aclarar que no recomiendo abiertamente, el uso de medicamentos caducados, además debo mencionar que en México, la venta de un medicamento caducado está tipificado como delito contra la salud, punible hasta con cárcel, así que…. Primeramente diré a usted que al igual que usted y yo, desde que nacimos, empezamos a envejecer, igual pasa con los medicamentos desde el momento de su elaboración…. Hace 40 años, ya existían los medicamentos de patente, pero NINGUNO, salvo quizás algunos biológicos (Vacunas, sueros, etc.) tenían fecha de caducidad. Podrían tener 5, 10, 15 años en anaquel, y todo mundo contento. Poco a poco fueron agregando la famosa fecha de caducidad a ‘algunos’ antibióticos, (No a todos), caracterizándose esos productos por presentar en la parte frontal superior del envase una pequeña banda de color rojo, que indicaba claramente que ese medicamento tenía caducidad, aún así, ésta era bastante buena, algunos tres o mas años de vida útil. Tal vez por los años de 1980, TODOS los antibióticos ya tenían impresa la fecha de caducidad, pero aún en esos años, el periodo de vigencia era de tres o más años. Ya en la década siguiente, es decir en los 90´s se comenzó paulatinamente la práctica de que TODOS los productos llevasen impresa una fecha de caducidad, y para la presente fecha, ya la totalidad de productos que se venden en una farmacia, tiene dicha vigencia máxima de uso, acorde con la normatividad mexicana en la materia. Quiere usar un desodorante? Pues verifique que no esté caducado. Quiere usar un talco? Pues vea muy bien que no esté caducado. Ahora, ¿Que significa el que tenga fecha de caducidad? Sencillamente que se está cumpliendo con la normatividad que aplican las autoridades sanitarias mexicanas, las cuales no permiten que ésta se extienda por más de dos años a partir de su elaboración. Entonces… Si un medicamento no está caducado, ¿Puedo usarlo con toda confianza? NO, definitivamente esa fecha no garantiza NADA; depende de otros factores como las condiciones en que éstos han sido manejados o almacenados, por ejemplo: Es muy frecuente que muchas familias guarden sus medicamentos en el peor lugar de la casa: En el baño o en la cocina; desde que se inventaron esos ‘espejitos’ para empotrar en el cuarto de baño, mal llamados ‘botiquines’, mucha gente guarda ahí sus medicamentos. Imagine usted el calor, el vapor, la humedad del cuarto de baño, esas condiciones deterioran rápidamente los medicamentos. El otro lugar es la cocina, también son frecuentes sobre todo las altas temperaturas que afectan la estabilidad de los medicamentos. Otra trampa mortal para los medicamentos, son los vehículos: Si, si usted tiene algún medicamento dentro de un automóvil, retírelo de inmediato y desechélo. Las temperaturas que puede llegar a alcanzar el interior de un automóvil expuesto al sol, excede con creces los 70 y 80 grados Celsius o centígrados. Entonces…. ¿Cómo hacerle para saber si un medicamento está en buen estado o no? Primeramente, y aunque no esté caducado, debemos observar, incluso desde la adquisición del mismo, la forma en que está almacenado en la farmacia, que no le pegue el sol directo, que no sea un lugar húmedo, etc. Luego debemos de observar las características del producto, por ej. Si es una solución, debemos verificar que ésta no tenga ‘grumos’ ‘impurezas’ ‘arenillas’ es decir, que siga siendo una solución translúcida y limpia. Si son tabletas, debemos verificar que no estén ‘talcosas’ es decir con apariencia de talco, que no tengan color diferente entre si, menos que estén ‘manchadas’ o ‘moteadas’ como si tuviesen sarampión. Que los envases estén herméticamente cerrados, atención especial en las preparaciones inyectables, que deben estar con una pureza absoluta y sin ningún tipo de materias extrañas. No deben tener olores extraños; Es muy frecuente que las leches para bebés, si no están bien almacenadas, se deterioran y ‘huelen’ mal; ese producto puede causar malestares al bebé. Ahora, veamos la contraparte. ¿Si está caducado, debo tirarlo? No necesariamente. Sin pretender defender a ningún laboratorio, es claro que existen laboratorios fabricantes de medicamentos que tienen muy altos estándares de elaboración, y que aunque estén obligados a poner fecha de dos años, sus productos siguen, (Si están bien manejados) sirviendo cabalmente VARIOS AÑOS MAS ALLÁ de la fecha impresa en los envases, lamentablemente no todos los fabricantes tienen esos estándares y menos aún ahora con tanta proliferación de laboratorios ‘patito’. Entonces ¿Cómo le hago? Bueno, si sus medicamentos están bien conservados y no tienen alteración apreciable, podremos utilizarlos sin ningún problema de toxicidad ni de eficacia hasta por unos DOS AÑOS más allá de lo impreso en ellos. De cualquier forma, por norma general, si se trata de productos para bebés, personas de edad avanzada o para tratar enfermedades que ponen en peligro la vida, NO DEBEMOS UTILIZARLOS. Recordemos que ningún texto suple la opinión experta de su médico. ¿Qué ocurre con el medicamento al estar en el límite de su fecha de caducidad? NADA… realmente no ocurre nada, el medicamento no lleva ni un ‘chip’ como en la antigua serie televisiva de ‘Misión Imposible’ donde se ‘autodestruirá’ tal día. Sencillamente sigue su propio y particular proceso de envejecimiento. ¿Qué nos pasa si lo utilizamos más allá de la fecha vigente? Pues si está en condiciones físicas aceptables, seguramente que nos hará el efecto terapéutico esperado. Entonces ¿Para qué sirve la dichosa fecha? Pues la norma lo expresa claramente: es el periodo durante el cual el laboratorio fabricante garantiza la actividad del medicamento al 100%, sin pérdida apreciable de la actividad probada en los laboratorios, mas no indica la fecha en la que el producto tiene o deja de tener actividad medicamentosa. Es muy frecuente que años después aún tengan actividad terapéutica en niveles superiores al 95% de dicha actividad inicial. No olvidemos que los principios activos, es decir las substancias que curan, son agregadas a líquidos, polvos, pastas, etc. (También llamados como ‘vehículo’, ‘excipiente’ etc.) para poder facilitar su administración y que dichos compuestos no alteran generalmente a la substancia base. La realidad es que las autoridades sanitarias exigen a los laboratorios una efectividad terapéutica de dos años a partir de la fecha de elaboración de los medicamentos, y los fabricantes se limitan a probar esa efectividad por los dos años; mas nunca hacen pruebas para ver como cambia esa efectividad al paso de los años, ni tampoco en cuantos años dejan de tener efectos terapéuticos. Nota agregada el 1-Abril de 2014, tomada del periódico 'El Financiero' en donde habla de medicamentos para la influenza y que han caducado. Dice en la parte final, textualmente: "Entre enero de 2012 y noviembre de 2013, fueron retiradas seis mil 419 unidades de Tamiflu, por fechas de caducidad vencidas, las cuales serían canjeadas por el fabricante. Desde finales de 2009, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), amplió la fecha de caducidad de estos medicamentos de tres a cinco años, al realizar pruebas que demostraron que mantenían inalterada su efectividad y seguridad" Lo anterior, dice en pocas palabras, que van a hacer pruebas pero que como ya vieron que si estaba bueno después de la fecha, 'ampliarán' su plazo de vigencia, y además, porque les costó buen dinero, entonces como tirarlos, ¿Verdad? Y así es para todos los medicamentos. El prestigiado periodico norteamericano The Wall Street Journal, publicó el 29 de Marzo de 2000, un estudio conjunto de Laurie P Cohen y el ejército de los E.U.A. relacionado con que los militares habían acumulado 1 000 millones de dólares en medicamentos caducados y debían destruirlos y reemplazarlos todos en un período de 2-3 años, pero antes de empezar con el proceso decidieron hacer pruebas para ver si extendían el plazo durante el cual podían seguir utilizando sus medicamentos. La FDA (Institución reguladora de medicamentos en E.U.A.) realizó pruebas de potencia a más de 100 medicamentos, incluyendo algunos que se venden con receta y otros que no la necesitan. Los resultados demostraron que el 90 % eran efectivos y seguros hasta 15 años después de haber caducado. Entonces… ¿Será negocio el que hacen los laboratorios? Pues… tal vez, un cálculo muy conservador realizado por un servidor, nos arroja el dato aproximado de que las farmacias mexicanas, pierden anualmente unos $ 600,000,000.00 (Seiscientos millones de pesos) por ese concepto, además, algo grave también: Esos productos no deben ser desechados al basurero, deber ser acopiados para ser trasladados a centros especializados para su desecho y eliminación adecuada, con la finalidad de no contaminar el medio ambiente, lo cual lamentablemente no se hace ya que no hay la infraestructura ni las condiciones para tal fin. Creo que una acción gubernamental podría ayudar a recoger productos medicinales en mal estado, pero no hay tal iniciativa. Me parece que a los laboratorios no les conviene que sus productos no circulen, ¿Para qué quieren tener productos con 10 años en el anaquel? Como las tarjetas telefónicas, si no las usas en determinado tiempo, no te daremos servicio. Ojo: con las vacunas, insulinas, biológicos, antibióticos en suspensión, y otros cuyo manejo es muy delicado, no debemos ir más allá de dicha fecha. Aunque hay estudios acerca de la estabilidad de la Aspirina, es sabido que el Ácido Acetil Salicílico (Aspirina) envejece con cierta certidumbre. Le contaré que he observado como el Ácido Acetil Salicílico, al envejecer, endurece y forma cristales largos que parecen ‘agujas’ y que ocasionan algún malestar estomacal, por lo que no recomiendo usarlo más allá de su vigencia. Es sabido también que los márgenes de estabilidad del antibiótico Tetraciclina son muy cortos, por lo que igual, no debe usarse mas allá de su caducidad. Para terminar, comentaré a usted un caso real, en donde colaboré para salvar??? una vida: En mi farmacia, siempre he intentado tener algunos medicamentos de urgencia, mismos que por fortuna, casi siempre han caducado (Es bueno por que no se han necesitado, sin importar su pérdida financiera). Entre ellos siempre tengo Suero Antialacrán, Suero Antiviperino, Anticrotálico y uno contra la picadura de la Araña Capulina o Viuda Negra llamado Aracmyn. Pues bien, en una ocasión, el Dr. Saúl Murillo Ortíz, médico prestigiado y reconocido en la localidad, recibe a un paciente grave picado por una araña capulina, y rápidamente solicita a nuestra farmacia un Aracmyn, lamentablemente, su costo alto y su baja demanda, hicieron que no lo surtiese, pero recordé tener uno que estaba caducado en donde se almacenaban esos productos para su destino final; por alguna razón, nunca me deshice del Aracmyn, por otra parte, medicamento difícil de encontrar. Lo localizo y veo que tenía SEIS años caducado, sin embargo se lo llevo al Dr. Saúl y le comento lo anterior, recuerdo hasta el presente sus palabras: "No hay opción, dámelo, gracias" corriendo a atender a su paciente. Ya posteriormente supe que se le aplicó el suero caducado y el paciente comenzó a restablecerse casi milagrosamente y salvó su vida. (Desde luego, el Aracmyn fue regalado, recuerde que no podemos vender un medicamento caducado). Para quienes gusten de ahondar un poco más en el tema, les remitiremos a unos muy interesantes enlaces, el presente post, está totalmente basado en las observaciones a través de más de medio siglo en el mercado farmacéutico mexicano. Para usted, estimado amigo, apreciable amiga, desde las frondas de Urícuaro, reciban mi saludo cordial.